Abril 3 años

Estan casi a tres años de edad, vaya que he recibido comentarios de los terribles 2 años. Bueno en realidad recordando esta etapa en los niños (de los famosos 2 años)  fue una prueba en mi carácter, me di cuenta de cuantas cosas necesito cambiar y cuanta paciencia necesito adquirir. jeje hubo de todo.... Momentos difíciles, cuando uno de mis hijos me retaba constantemente, con sus ojitos llenos de enojo, queriendo hacer su voluntad, queriéndo lanzarme sus carritos con una puntería perfecta y por otro lado YO la mamá que quiere tener todo bajo control, enojada por el gran beisbolista en potencia. Momentos de GRITOSSSSSSSS¡¡¡ Mamá LECHEEEEE¡¡¡ Mamá me PEGOOOOOÓ¡ los tres alrededor de mi, exigiéndome que les diera lo que pedían o los tres peleando por los juguetes........... Momentos en los que la mamá es la que quiere gritar..... dos niños aprendiendo a dejar el pañal, con camas, pisos y sillones mojados, muchas veces riéndose otras asustados, momentos de querer aprender a cambiarse y gritar desesperados por ponerse la camisita y no poder......pero momentos,  que no voy a volver a vivir igual en donde me desesperé, grité, lloré, discipliné, exageré..... que bendición por esos momentos, porque al ver atrás sé que crecí, que aprendí y sobre todo conocí más de como somos nosotros con Dios, muchas veces tan egoistas, tan ensimismados, soberbios, apáticos, majaderos..... en sí inmaduros que somos como seres humanos.

Pero también pude vivir la alegría desbordante de escuchar a tres hermosas criaturas decirme TE AMO, reír, verlos creerse tan independientes y a la ves ser tan lo contrario, sentirme tan amada y tener fans que lloran por mi cuando me voy a otro lugar. Ver caritas llenas de emoción al descubrir nuevas cosas, nuevas formas, nuevos lugares y disfrutar cada cosa con tal asombro que muchas veces envidio, esa capacidad de ver las cosas y valorarlas y emocionarse tanto al ver una mariposa. Llorar de alegría al saberme amada y plena con la familia que Dios me ha dado.  Creo que tanto en los tiempos buenos como en los malos he aprendido tanto que no me arrepiento de absolutamente nada de lo que he vivido, porque se que de todo aprendí algo..... y eso fue EL AMOR.